El 90 por ciento de los casos es benigno y únicamente se emplean maniobras mecánicas para detener el sangrado
• En niños con hemofilia, leucemia o alguna enfermedad sistémica, serán necesarios estudios de laboratorio más específicos para su tratamiento
Los cambios de temperatura, los niveles bajos de humedad en el ambiente, la falta de lubricación y humectación en la nariz, son algunas de las causas del sangrado nasal, signo que se presenta en el 90 por ciento de los casos de forma benigna, afirmó el doctor Juan Rosas Peña, director del Hospital General de Zona 2A Troncoso.
El otorrinolaringólogo del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) señaló que la mejor forma de prevenir el sangrado es tener una adecuada higiene nasal, para ello, existen sprays enriquecidos con agua de mar que humectan la mucosa y aceite de almendras dulces que lubrican ambas fosas nasales.
Comentó que esto evitará la formación de costras que al quitarlas provoquen sangrado y resulte perjudicial. Subrayó que este problema se presenta con mayor frecuencia -50 por ciento- en niños entre 6 y 12 años mientras que en menores de 5 años es del 35 por ciento.
El doctor Rosas Peña explicó que la forma más fácil de contener este sangrado es con maniobras mecánicas, que consiste en el uso de tapones nasales y apretar la nariz por espacio de 5 a 10 minutos, también se pueden colocar compresas de agua fría en la frente, masticar hielo o bien colocarlo debajo del labio superior.
En caso de que el sangrado no se detenga, dijo que primero es necesario conocer de dónde proviene este trastorno para así brindar tratamiento con cauterización del vaso sanguíneo, el cual puede ser química con nitrato de plata o bien eléctrica con un cautín.
Indicó que en el tratamiento para niños con hemofilia, leucemia, alguna enfermedad sistémica que altere la función hepática o de los factores de la coagulación, se prescribirán medicamentos que contrarresten esas alteraciones, en todos los casos, el tratamiento dependerá del diagnóstico.
El especialista del Seguro Social hizo hincapié en evitar la automedicación, no usar vaselina, manzanilla, cremas con alto grado de lanolina ni bicarbonato para humectar y lubricar la nariz, ya que algunos componentes pueden generar rinosinusitis.
En caso de alguna emergencia, el IMSS cuenta con los servicios de urgencias en sus Unidades de Medicina Familiar donde los menores serán evaluados para conocer el origen del sangrado y así evitar complicaciones.