Tras ser informada sobre el abandono de residuos peligrosos biológico-infecciosos (RPBI) en un lote baldío del municipio de Chihuahua, Profepa inició una investigación en contra de quien resulte responsable por dejar dichos desechos.
Tras ser informada sobre el abandono de residuos peligrosos biológico-infecciosos (RPBI) en un lote baldío del municipio de Chihuahua, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) inició una investigación en contra de quien resulte responsable por dejar dichos desechos con repercusiones nocivas para la salud y el ambiente.
Trabajadores de Protección Civil de la Ciudad de Chihuahua notificaron a las oficinas de representación de la Procuraduría sobre el hallazgo de estos residuos, los cuales ya eran resguardados por personal de seguridad pública.
Los inspectores de Profepa acudieron al sitio donde revisaron el material abandonado, e identificaron lo siguiente: tres botes rojos de polipropileno con aproximadamente 7 kilogramos de agujas; un bote pequeño de polipropileno, color rojo, con cuatro kilogramos de agujas. Además, una bolsa de polietileno con residuos no anatómicos (materiales de curación), envases que no contaban con el símbolo universal de residuos biológico infecciosos, ni con ninguna etiqueta de identificación.
Posteriormente, la dependencia solicitó a una empresa de manejo de residuos peligrosos biológico-infecciosos para su traslado a una empresa autorizada por la Semarnat para su tratamiento y posterior disposición final, hecho que se suscitó el pasado 27 de enero.
Inspectores de Profepa colaborarán con la investigación para verificar y/o identificar el posible establecimiento generador de estos residuos.
Con el propósito de orientar a los generadores de RPBI, la Profepa impartirá pláticas de capacitación respecto del cumplimiento de la normatividad en materia ambiental en la medida de sus posibilidades y de conformidad con sus atribuciones y competencias